Rincones de Castilla y León

12 rincones maravillosos (y poco conocidos) de Castilla y León

Acebales, románico, cuevas naturales o pueblos con encanto: lugares para perderse en una comunidad rica en patrimonio.

12 rincones maravillosos (y poco conocidos) de Castilla y León

Castilla y León es mucho más que sus grandes y archiconocidos recursos turísticos: Salamanca, Segovia, Ávila, Zamora, las catedrales góticas de Burgos o León… Perdidas entre montes y páramos existe otra buena cantidad de excusas para coger coche y mapa y lanzarse a recorrerlas. El problema ha sido seleccionar solo 12.

VALLE DEL SILENCIO (León)

Desde el borde sur de la hoya que cierra el Bierzo una carretera de montaña estrecha y serpenteante remonta el río Oza. Los laterales de la pista asfaltada son una pared continua de bosque caducifolio de increíble frondosidad en el que se alternan castaños, chopos, serbales, nogales, fresnos y alisos. El río Oza se despeña a saltitos, remoloneando entre resaltes y pozas. Un paraíso verde, húmedo y oscuro, sobre todo si se tiene la suerte de visitarlo en un día de niebla, que contrasta con la aridez y ausencia de arbolado de las cumbres de los montes Aquilanos. El valle del Silencio fue lugar predilecto de ermitaño y santos, quienes construyeron varios monasterios e iglesias. La carretera sube hasta la más famosa de todas ellas, la iglesia de Peñalba de Santiago, un pequeño templo mozárabe que es todo lo que queda de un monasterio fundado en el siglo X por San Genadio.

Más info: Valle del Silencio, Turismo de Castilla y León.

CUEVAS DE OJO GUAREÑA (Burgos)

12 rincones maravillosos (y poco conocidos) de Castilla y León

Ojo Guareña, en las montañas del norte de Burgos, es el segundo complejo subterráneo de mayor recorrido horizontal de España con 110 kilómetros de galerías subterráneas exploradas y topografiadas. Al abrigo de una sus bocas —conocida como la sala del Ayuntamiento— se reunió durante siglos el Concejo de los pueblos cercanos, una tradición que duró hasta 1924.

En otra de las bocas se levantó la ermita de San Bernabé, un interesante eremitorio cristiano construido en el interior de una galería fósil de la cueva, y en cuyas paredes aún pueden verse unos frescos rupestres pintados hacia el siglo XVII. Las primeras exploraciones de Ojo Guareña las llevó a cabo el grupo burgalés Edelwiss en 1956. La cueva se puede visitar con guía.

Más info: Cuevas de Ojo Guareña, ACTE.

LAS CINCO VILLAS Y EL CASTILLO DE MOMBELTRÁN (Ávila)

El castillo de Mombeltrán domina aún la cara sur de la sierra de Gredos y el valle del Tiétar. Como recordando el poder que sobre los cinco pueblos de esta comarca ejercieron durante siglos los duques de Alburquerque. La fortaleza tiene dos recintos de forma cuadrada, antemuro, escarpa y foso y unos grandes torreones cilíndricos defendiendo cada una de sus cuatro esquinas. Mombeltrán es la cabeza de las Cinco Villas, pero las otras cuatro no le quedan a la zaga en interés. Cuevas del Valle es la que ha conseguido mantener el sabor arquitectónico más original. En San Esteban, sorprende su enorme iglesia parroquial, antigua fortaleza defensiva. Santa Cruz del Valle es la más pintoresca de las cinco. Villarejo del Valle completa el elenco.

Más info: Web oficial del Ayuntamiento de Mombeltrán.

12 rincones maravillosos (y poco conocidos) de Castilla y León

EL MILAGRO DE LA LUZ DE SAN JUAN DE ORTEGA (Burgos)

Un milagro ocurre cada equinoccio (del 20 al 21 de marzo y del 22 al 23 de septiembre) en la pequeña iglesia de San Juan de Ortega, perdida en lo alto de los montes de Oca. Esos dos días, y solo en esos dos días, un rayo de luz entra por la fachada izquierda de la fachada del templo y recorre, como un foco de cine, el capitel izquierdo de la entrada al presbiterio, de talla románica, que representa la Anunciación. Es como si un experto en arte lo iluminara poco a poco con una linterna dorada para explicar a sus alumnos una clase de historia sagrada. ¿Milagro? No. Los canteros medievales eran tan expertos en tallar la piedra como en astronomía y quisieron dejar en esta iglesia gótico – isabelina del monasterio dedicado a San Juan de Ortega, el benefactor del Camino de Santiago, una audaz prueba de sus conocimientos. Los vecinos lo llaman el milagro de la luz, y reúne cada año durante esas dos fechas a cientos de curiosos y expertos en arte.

Más info: Monasterio de San Juan de Ortega, Turismo de Castilla y León.

FRÍAS (Burgos)

La canción popular establece que Frías tiene tres cosas que vuelven loca a Castilla: su castillo, sus mujeres y el vinillo de la Roa. Ciertamente el castillo, encaramada de manera imposible sobre un roquedo de toba que domina el pueblo es para volver loco a quien se viera obligado a construirlo y a los que intentaran tomarlo por la fuerza. La armonía del casco medieval de Frías, pegado a las formas caprichosas de la ladera, impacta al viajero y no solo por motivos estéticos. Todo, absolutamente todo en el pueblo, desde las viviendas a la iglesia de San Vicente, pasando por el puente medieval fortificado que salva el Ebro, está construido con el mismo material: toba caliza. Un sendero de ronda rodea el pueblo y deja estampas de amenas charlas vecinales entre balcones adornados con macetas. De sus iglesias, destaca la portada de San Vítores. Otra portada, la de la iglesia de San Vicente, está expuesta en el Museo de Claustros de Nueva York.

Más info: Turismo de Frías.

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ROMÁNICO POBRE DE SAHAGÚN (León)

A Sahagún, en pleno Camino de Santiago a su paso por León, se le llamó el Cluny español por el cobijo que los peregrinos encontraban en el gran monasterio medieval de San Benito, una de las instituciones claves en el reino leonés y de la presencia de la orden francesa de Cluny en suelo español. Fueron los monjes cluniacenses los que hicieron de San Benito un monasterio rico, famoso y con buenas rentas. Aquel foco de riqueza atrajo al burgo que iba creciendo en torno a la abadía a un buen número de nuevos residentes, entre ellos muchos artesanos mudéjares de la España musulmana que convirtieron a Sahagún en la capital del románico pobre por el uso de ladrillo de barro en vez de piedra en iglesias aún hoy tan monumentales como la de San Tirso, la de San Lorenzo o La Peregrina.

Más info: Web oficial de turismo del Ayuntamiento de Sahagún.

MONASTERIO DE SAN ANDRÉS DE ARROYO (Palencia)

El románico dejó excelsos ejemplos en la provincia de Palencia. Uno de ellos es este monasterio cisterciense femenino ubicado junto a la localidad del mismo nombre y que dependió del de las Huelgas Reales de Burgos. La joya de San Andrés de Arroyo es el claustro, con una gran colección de columnas pareadas y capiteles tallados de excelente factura. El conjunto fue consagrado en 1222 y guarda la esencia de un gran conjunto monástico de transición entre el románico y el gótico. San Andrés de Arroyo es un buen punto de partida para la ruta del Románico Palentino, la provincia que más ha puesto en valor el patrimonio de esta época. Entre los puntos inexcusables: la iglesia de San Martín, en Frómista; San Zoilo, en Carrión de los Condes, o Santa María la Real, en Aguilar de Campoo.

Más info: Monasterio de San Andrés de Arroyo, Turismo de Castilla y León.

12 rincones maravillosos (y poco conocidos) de Castilla y León

MONTAÑA PALENTINA (Palencia)

Es el extremo norte de la Castilla histórica. O la ladera sur de la Cordillera Cantábrica, la que da forma al norte peninsular. La Montaña Palentina es una comarca de altos valores medioambientales y paisajísticos donde se alzan los picos más altos de la Cordillera Cantábrica -Peña Prieta (2.538 m), Curavacas (2.500 m) y Espigüete (2.450m)- y donde nacen dos de los principales ríos de la comarca: el Pisuerga y el Carrión. Un territorio de transición con densos bosques de roble, haya, pino albar, acebo, castaño y tejo – en los que por cierto se acaba de reintroducir el bisonte europeo con ejemplares traídos de Polonia – y con grandes recursos para el turismo rural: pueblos monumentales como Cervera de Pisuerga o Aguilar de Campoo, mucho y buen románico, arqueología industrial de antiguas instalaciones mineras y recia gastronomía montañesa.

Más info: Montaña Palentina, Turismo de Palencia.

MIRANDA DEL CASTAÑAR (Salamanca)

Solera y abolengo. Miranda del Castañar es una de las villas medievales más bonitas y mejor conservadas de la sierra de Francia. El tiempo ha pasado una menguada factura a esta pequeña localidad de la montaña salmantina, donde uno puede reencontrase con el silencio mientras camina por sus calles empedradas. Las casas mantienen la tipología habitual de la sierra, con entramados de vigas de madera muchas veces a la vista. A quien si pasó factura el tiempo fue al castillo, que preside el pueblo, en un mal estado de conservación. A sus pies está la antigua plaza de armas, hoy plaza del pueblo y para muchos la plaza de toros más antigua de España, ya que se celebraban allí lidias desde el siglo XVI.

Más info: Miranda del Castañar, Web oficial de turismo de España.

CLAUSTRO DE SANTA MARÍA LA REAL DE NIEVA (Segovia)

12 rincones maravillosos (y poco conocidos) de Castilla y León

Un pequeño pueblo segoviano en mitad de una llanada interminable que en verano espejea como un desierto conserva una de las joyas histórico-artísticas de Castilla y León. La historia de Santa María la Real de Nieva empieza hacia 1393 cuando la reina Catalina de Lancaster ordenó levantar una iglesia en un lugar donde se apareció la Virgen.

El templo fue ampliado ya en pleno siglo XV con una soberbia portada. Santa María la Real de Nieva es célebre sobre todo por los capiteles historiados de su claustro, un conjunto de transición entre el románico y el gótico. Esos capiteles son el mejor documento histórico que nos pudieron legar los artistas medievales sobre las formas de vida del pueblo llano, de la nobleza y del clero de aquella centuria. Aparecen recogidos los 12 meses del año, cada uno con las tareas que el ciclo agrícola imponía a la plebe; su realismo es tal que permite comprobar cuán poco ha variado ese ciclo en el campo segoviano desde entonces.

Más info: Web oficial del Ayuntamiento de Santa María la Real de Nieva.

ACEBAL DE GARAGÜETA (Soria)

Con un total de 460 hectáreas, Garagüeta es el bosque natural de acebos más grandes de Europa. Una reliquia de la naturaleza de altísimo valor ecológico. De esas 460 hectáreas, ubicadas en la sierra de Montes Claros, al noreste de la provincia, 180 están ocupadas por una mancha continua de acebo, que bien podría ser el resultado de los bosques primigenios de roble y haya, en los que el acebo aparece como acompañante. La fauna del lugar engloba tordos, corzos y zorzales. Hay rutas señalizadas por el interior del acebal que discurren por las zonas de mayor umbría, donde el acebo forma cuevas naturales de denso que es, y también junto a típicas chozas de pastores de forma cilíndrica. Las rutas suelen acabar en el Aula de Interpretación La Casa del Acebo, situada en el pueblo más próximo al acebal que es Torrearévalo.

Más info: Acebal de Garagüeta, Turismo de Castilla y León.

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VILLA ROMANA DE ALMENARA-PURAS (Valladolid)

En 1887 apareció bajo unos terrenos de labor en el pago de la Calzadilla, entre los términos municipales de Almenara de Adaja y Puras, en la provincia de Valladolid, un gran mosaico romano. No eran tiempos ni de sensibilidad por el pasado ni de alegrías presupuestarias, por lo que el hallazgo quedó en el olvido. Hasta que en 1942 se empezó a excavar con criterio científico la zona. Lo que había allí abajo era una villa tardomana, habitada entre los siglos IV y V, con una de las mejores colecciones de mosaicos de toda Hispania. Unos 400 metros cuadrados de teselas en perfecto estado que hablaban de la opulencia con la que vivieron sus propietarios. Hoy la Villa romana de Almenara-Puras se ha convertido en el Museo de las Villas Romanas, una obra pionera en España, que recrea in situ y de una manera muy didáctica lo que fueron estas factorías agrícolas del mundo romano.

Más info: Villa romana de Almenara-Puras.

 

Fuente: elpais.com