Queremos compartir con vosotros una de las rutas de senderismo más atractivas de Castilla y León, aunque castellano y leonesa solo sea la mitad, puesto que la otra mitad está en Asturias. Se trata, como ya habréis imaginado, de la Ruta del Cares.
Es probablemente una de las rutas más famosas, puesto que atraviesa durante 11 kilómetros una garganta entre dos grandes montañas siguiendo el río Cares. La belleza de la ruta es tal, que es conocida como la Garganta Perfecta.
La verdadera ruta del Cares
Aunque el tramo más conocido, une la localidad leonesa de Caín con la asturiana de Poncebos, esta ruta parte la cabecera de la población Posada de Valdeón. Recorriendo otros 8 kilómetros más, para atravesar la zona del Parque Nacional de los Picos de Europa.
Curiosidades de esta ruta
Los senderistas que atraviesen esta garganta, lo primero que les llamará la atención es la presencia de un canal de agua que discurre mediante túneles, viaductos,.. Se trata del canal de alimentación de la central minihidroeléctrica de Camarmeña – Poncebos. Con una pendiente controlada, el agua recogida en la presa del Caín, atraviesa esta garganta para llegar a la central, al otro lado del paso.
Esta ruta no es circular, por lo que una práctica muy habitual es que dos equipos de personas partan de ambos extremos, intercambiándose las llaves del coche a mitad de recorrido. Si no puedes hacer esto, en ambas cabeceras, existen gran cantidad de servicios de taxi o autobús que permiten ir al punto de origen. Pero tener en cuenta que de Caín a Poncebos por carretera son de 110 a 120 km.
El recorrido fue concebido como ruta de los trabajadores que, de 1916 a 1921, realizaban el canal de alimentación de la central hidroeléctrica. Durante su ejecución trabajaron más de 500 obreros, de los cuales fallecieron unos 11 por accidente.
La particular orografía y la presencia de agua en esta garganta, hace que la flora sea muy especial, dándose un bosque mediterráneo con encinas que cuelgan de los empinados riscos.
Recorriendo la ruta del Cares
La ruta más habitual son los casi 12 kilómetros entre Caín y Poncebos. Este recorrido puede realizarse en algo menos de 3 horas a un ritmo medio.
Aunque la ruta también es transitada en invierno, la presencia de nieve hace poco recomendable paso a aficionados al senderismo, puesto que no existen barandillas más que en unos pequeños tramos de especial peligrosidad; y aunque no es especialmente peligrosa, es aconsejable ir con cuidado durante todo el recorrido.
Saliendo de Caín
Una de las mejores experiencias es realizar la ruta ida y vuelta, aunque mejor si no se realiza con niños.
Siguiendo, más adelante, cambiaremos de margen usando un puente metálico. Tanto la vista de la mañana como de la tarde hace de esta parte especialmente hermosa. Desde aquí entraremos en una parte muy vertical de la garganta y con bastante humedad.
Es casi imposible perderse, por el gran número de visitantes que atraviesan esta ruta y a que prácticamente no hay desviaciones en la ruta. A falta de 4 kilómetros, más o menos, encontramos una desviación hacia un sendero del tipo GR, que enlaza con Covadonga, siguiendo la ruta de huida de las tropas musulmanas.
Galería de imágenes de la ruta del Cares
Como puedes ver, la ruta es preciosa y aunque con cierto peligro, sobre todo para los más pequeños, igualmente es una de las rutas más atractivas para realizar en grupos pequeños.
Fuente: destinocastillayleon.es