La grasa abdominal. Siempre mi gran enemiga. Perder grasa abdominal es difícil (no imposible). Es un gran problema para muchas personas… A veces, parece que todo lo que comes termina en tu abdomen. Y Parece que cuando haces una dieta estricta para perder peso, a la vez setas perdiendo tu pasa muscular y se te quedan las carnes “flojas” y nada firmes. Cuantas personas hemos visto que parecen flaquitas y luego tienen una panza bastante visible. El problema encima es: entre mayor te haces, mayor es el problema.
En este artículo conocerás el porqué de este problema y te daremos ideas de como combatir tu grasa. A pesar de ser un artículo enfocado sobre todo en hombres (hablamos de la testosterona) muchos de los consejos para perder grasa abdominal son igual de efectivos para mujeres que para hombres)
Si te centras en las calorías que consumes, seguro perderás peso y grasa, pero no vas a cambiar mucho las grasas almacenadas en las zonas más localizadas (en este caso el abdomen). Para que la pérdida de grasa afecte al estómago en particular te tienes que enfocar en tu equilibrio hormonal. Para deshacerte de tu barriga tienes que conseguir encontrar la armonía entre 4 tipos de hormonas.
La grasa almacenada en el abdomen es causada por la hormona cortisol. Existen otras tres hormonas que contrarrestan los efectos de la última (la hormona del crecimiento, la testosterona y DHEA. Estas tres te ayudarán a eliminar y quemar esa grasa abdominal.
Si eres joven, las hormonas son mucho más efectivas y te ayudarán a contrarrestar el efecto de engordar con más efectividad. Pero, a medida que envejeces, esta batalla se vuelve más difícil de ganar.
CLAVES PARA PERDER GRASA ABDOMNIAL:
Reducir el cortisol:
Reduce el estrés en el trabajo y en tu vida privada y asegúrate de dormir bien.
No sobreentrenes (procura no entrenar más de una hora) 4-5 veces a la semana es suficiente.
Evita el estrés provocado por la comida: evita el azúcar, menos químicos, pesticidas y evita alergias e intolerancias (la mayoría provienen de las harinas y productos lácteos)
Relájate! Encuentra tu mejor modo de relajarte (esto ya dependerá de ti, todos somos diferentes).
Estimula tu hormona del crecimiento:
Duerme bien. Las hormonas del crecimiento se desarrollan sobre todo durante nuestro sueño nocturno.
Asegúrate de incluir bastantes proteínas. La hormona del crecimiento se produce gracias a este nutriente.
Limita el consumo de azúcar. Si tu cuerpo tiene mucha insulina, la hormona del crecimiento no podrá hacer su trabajo. Por eso también se recomienda evitar carbohidratos y azúcares antes de ir a dormir.
Practica ejercicios eficaces. No más de una hora y céntrate en los grandes grupos musculares que te ayudarán a impulsar la hormona del crecimiento
Reduce el estrés. El estrés disminuirá el desarrollo de la hormona.
Estimula la hormona DHEA y los niveles de testosterona:
Asegúrate de que consumes suficiente cantidad de grasas saturadas y Omega 9. Estos dos tipos de grasa aumentaran la DHEA y la testosterona. Aguacate, frutos secos, aceite de canola, de oliva o mantequilla de cacahuetes son algunas recomendaciones.
Ejercicios efectivos. Igual que en la hormona del crecimiento, efectivos ejercicios centrados en los grupos musculares más grandes te ayudarán a aumentar los niveles de testosterona y de DHEA.
Reduce el estrés
No uses ropa muy apretada, esto ocasiona que aumentes tu temperatura corporal y frenará la producción de testosterona.
Reduce la ingesta de cualquier tipo de alcohol.
En resumidas cuentas, intenta relajarte, no te agobies ni te estreses (este en mi caso es mi mayor problema, me estreso con facilidad). Dedica tiempo a algo que disfrutes y que te guste y párate a reflexionar cuando te sientas angustiada.
Realiza ejercicios con moderación, sin quemarte hasta los límites y duerme bien, descansa (al menos 8 horas de sueño profundo sería lo ideal)
Fuente: c.facilisimo.com
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