Dejar el chupete

5 trucos para ayudar a tu hijo a dejar el chupete

Cómo quitar el chupete

La mayoría de los padres han dado el chupete a sus hijos en algún momento. El chupete no solo ayuda a calmar al bebé cuando está inquieto o llora, sino que también le ayuda a conciliar el sueño más rápido. Además, un estudio realizado por la Asociación Española de Pediatría desveló que el chupete reduce el riesgo de muerte súbita del lactante debido a que activa los mecanismos cerebrales que controlan las vías respiratorias superiores.

El uso del chupete incluso se ha considerado un método analgésico no farmacológico para aliviar molestias puntuales como los síntomas de la salida de los dientes en el bebé o el malestar asociado a la gripe. Usar el chupete también estimula el instinto de succión infantil, lo cual es especialmente útil cuando el pequeño tiene dificultades para lactar o no sabe extraer bien la leche del pecho de su madre. Además, el chupete reduce el riesgo de sobrepeso u obesidad en los niños. Sin embargo, todo no es positivo. El chupete también se ha relacionado con algunos riesgos de salud para el bebé.

¿Por qué deberías tener cuidado con el chupete? Riesgos asociados al uso del chupete

El uso del chupete en los niños es un asunto muy controvertido en la comunidad pediátrica debido a los riesgos que representa a corto y largo plazo. Su uso durante las primeras semanas de vida incrementa los problemas para la instauración de la lactancia materna, a la vez que aumenta el riesgo de un destete precoz. Según una investigación realizada en la Universidad Jaume I, el uso del chupete está relacionado con alteraciones de la dentición, específicamente, con malformaciones bucodentales y un incremento del riesgo de aparición de caries.

Este estudio también encontró que su uso a partir de los 6 meses se asocia con problemas en el habla y la articulación de palabras. Además, aumenta el riesgo de succión digital en la infancia, la aparición de otitis media en los primeros años de vida y el consumo de tabaco en la adolescencia y adultez. Y en muchos casos se ha relacionado con un incremento de gases en el intestino y la consecuente aparición de los incómodos cólicos en los pequeños.

¿Cuándo deberías quitarle el chupete a tu bebé?

El momento más adecuado para retirarle el chupete a un niño varía de un caso a otro ya que depende de diferentes factores, desde el estado de salud del bebé hasta su capacidad de adaptación a los cambios o el apoyo familiar. No obstante, en la mayoría de los casos la Asociación Española de Pediatría recomienda iniciar la retirada a partir de los 6 meses para evitar que cause alteraciones dentales en los pequeños. A algunos niños se les puede dejar el chupete hasta el primer año de vida, pero a partir de este momento ya no se recomienda su uso en ningún caso.

edad dejar chupete

5 estrategias para quitarle el chupete a tu bebé

Algunos niños dejan el chupete de manera voluntaria y natural, pero no es lo habitual. Por lo general, a la mayoría de los niños les resulta muy difícil desprenderse del chupete y superar esta etapa ya que es una fuente de tranquilidad y seguridad. Si este es el caso de tu hijo, en Etapa Infantil, te proponemos algunas estrategias para que quitarle el chupete a tu hijo no se convierta en un dolor de cabeza.

1. Reduce su uso paulatinamente

La Asociación Española de Pediatría recomienda reducir el uso del chupete de manera paulatina hasta que el bebé desaprenda el hábito. Una opción es limitar el tiempo que el niño pasa con el chupete, quitándoselo cada vez más rápido. Otra alternativa consiste en quitárselo mientras juega o ve la tele y dejárselo solo en situaciones de estrés o para dormir. La idea es que el pequeño lo use cada vez menos hasta que se olvide definitivamente de él.

2. Intercambiarlo por un regalo

Un truco muy efectivo para retirar el chupete a un niño mayorcito consiste en proponerle que lo ofrezca a cambio de un regalo. Ya sea al ratoncito Pérez, a Papá Noel o a los Reyes Magos, los personajes ficticios se pueden convertir en los aliados perfectos para que el niño les ofrezca por voluntad propia su chupete a cambio de un juguete u otro regalo que le haga mucha ilusión. De esta manera, la decisión final será suya, lo cual le ayudará a desprenderse más fácilmente de este hábito y además tendrá como recompensa el regalo.

3. Ritual o fiesta de despedida

Este truco funciona muy bien con los niños más mayorcitos que entienden el concepto de separación o despedida. La idea radica en organizar una fiesta en casa o preparar un ritual en el que el pequeño pueda despedirse de su chupete y desprenderse de este hábito. Es importante que le expliques al niño por qué debe dejar ir su chupete y qué beneficios le reportará para animarle a dar el paso. Si el pequeño se muestra muy reticente siempre podéis guardarlo en un sitio en casa donde pueda encontrarlo con facilidad cuando más lo necesite.

4. Corta o pincha la tetina

Esta es una forma muy sencilla de conseguir que el niño pierda el interés por el chupete de manera rápida. Al cortar o pinchar la tetina, la sensación al chuparla deja de ser tan placentera como antes y, en la mayoría de los casos, los peques empiezan a rechazar por voluntad propia el chupete. Para pincharla puedes usar una aguja de coser y hacerle varios agujeros para que pierda el aire en su interior. Para cortarla, simplemente usa unas tijeras con las cuales podrás retirar la punta.

5. Untar la tetina con sabores desagradables

Mojar la tetina con sabores desagradables al paladar como el limón o el vinagre suele ser un truco muy efectivo para conseguir que el niño deje el chupete. El mal sabor que deja el chupete en la boca del pequeño le hará escupirlo y poco a poco empezará a rechazarlo por voluntad propia. Para este truco recuerda utilizar siempre alimentos o líquidos comestibles y seguros que no pongan en riesgo la salud del niño.

 

Fuente: etapainfantil.com

Hacer felices a los niños

10 buenos hábitos que hacen felices a los niños: ¿Los incluyes ya en su rutina?

Impulsando la felicidad infantil con hábitos saludables en su vida diaria

La felicidad de los niños es una de las principales preocupaciones de los padres. A menudo, nos preguntamos qué podemos hacer para que los más pequeños de la casa sean más felices y crezcan con una actitud positiva hacia la vida. Existen muchos hábitos y prácticas que pueden contribuir a la felicidad de los niños. En este artículo, os vamos a mostrar 10 de ellos para que los podáis empezar a integrar en vuestra vida familiar.

¿Cómo integrar hábitos saludables en la familia?

Si quieres que tus hijos crezcan sanos y felices, una de las claves para el éxito se encuentra en los buenos hábitos. Además de poder relacionarse con los amigos y pasar tiempo en casa viendo películas en familia, algunos de los hábitos que hacen más felices a los niños son:

1. Juegos al aire libre frecuentemente

Los juegos al aire libre permiten a los niños estar en contacto con la naturaleza y moverse, fundamental para canalizar su energía. Además de ayudarles a controlar su energía, el contacto con la naturaleza tiene muchos beneficios para la salud mental: libera endorfinas que nos hacen sentir más felices, reduce los niveles de estrés y ansiedad y previene los cuadros de depresión.

2. Hacer manualidades

La creatividad es algo que destaca en los niños. Siempre tienen grandes ideas, aunque no todas ellas pueden ser llevadas a la práctica, ¿verdad? Entonces, lo mejor es darles otras ideas y recursos: manualidades o experimentos. Con estas actividades, no solamente estaremos fomentando la creatividad, sino que también trabajaremos la motricidad fina.

3. Cocinar los platos preferidos de la familia

Todos tenemos platos que nunca nos cansamos de comer, ¿cierto? Bueno, pues no hay mejor manera de disfrutar de ellos que preparándolos con los peques de la familia. La cocina es una de las mayores aficiones de los niños, algo nada extraño teniendo en cuenta que nos ven cocinando a diario. Aunque para nosotros es una obligación, para ellos es un juego. Deja que disfruten ayudándote a preparar esta cena saludable y equilibrada o, ¿el postre favorito del hermanito?

4. Permite que se relacionen con los amigos

Las relaciones sanas son esenciales para una buena salud y no solo para los niños. Dejar que pasen tiempo con los amigos, los vecinos o los primos, les permitirá comprender mejor la naturaleza de las relaciones, los comportamientos sanos y adecuados y, sobre todo, la importancia de las mismas.

5. Leer libros

La lectura, como siempre decimos, es imprescindible en la educación de los niños por sus muchos beneficios. Pero, en este caso, también vamos a destacar el poder de esta para hacer sentir más felices a los niños: pasan tiempo de calidad con los padres explorando nuevos mundos. ¡Suficiente para que empecemos a leer un poco con ellos a diario!

6. Viajar en familia

Viajar es otro de los hábitos que hacen felices a los niños y es que, con estas pequeñas (o largas salidas), los niños exploran y conocen el mundo. Al viajar con nuestros hijos, satisfacemos su curiosidad al permitirles conocer nuevas ciudades, pueblos, costumbres o estar en contacto con otras lenguas.

Hábitos saludables en la familia

7. Practicar ejercicio cada día

Practicar deporte, además de hacerles felices, es necesario para el correcto crecimiento y desarrollo de los pequeños. Por ello, es una gran idea apuntarles a actividades extraescolares que les gusten y que estén relacionadas con el deporte: fútbol, pádel, natación, artes marciales… además, también es una buena idea practicar deportes en familia, de modo que aprender a cooperar y a entender la importancia de trabajar en equipo.

8. Ayudar, ayudar y ayudar

Pese a que, en muchas ocasiones, nos quejamos de que los niños no nos ayudan suficientemente en casa, lo cierto es que es algo que les encanta. Simplemente, debemos plantearles esta ayuda como un reto desde bien pequeñitos y tener paciencia. Muchas veces, cuando quieren ayudarnos, no les dejamos que lo hagan porque nosotros lo hacemos más rápido. Cambiar esta respuesta por nuestra parte, no solo les hará más felices, sino que también aprenderán a ayudarnos cuando se lo pidamos en el futuro.

9. Hacer alguna colección

A tu hijo, ¿le gustan los coches? O, a tu niña, ¿las muñecas? Bueno, sean cuales sean sus gustos, seguro que a tus niños les encantará coleccionar algo. Para ello, solo debes buscar qué es lo que les llama la atención y empezar una colección por ellos. Pronto aprenderán a disfrutar de este hábito, si es que no lo hacen ya, y te pedirán comenzar otras colecciones contigo.

10. Tiempo con los padres y los abuelos

¿Quieres ver a tu hijo 100% feliz? Permite que pase tiempo con sus abuelos: el amor que hay entre ellos no conoce límites. No importa cuánto tiempo pasen juntos, los niños siempre van a querer más. Les encanta la manera en la que los abuelos les consienten, las historias que les cuentan o estos paseos que dan por el parque. Deja que disfruten los unos de los otros, pues no solamente serán tus hijos los que estén felices: los abuelos, también.

Los hábitos saludables aportan felicidad. Solo reflexiona en cómo te sientes tú cuando puedes hacer lo que te gusta, aquello para lo que no siempre tienes tiempo. Pues, a tus peques, les sucede lo mismo. Si quieres verlos felices, permíteles relacionarse con los demás, busca actividades que representen tiempo de calidad contigo y, sobre todo, estimula su creatividad. Recuerda: los niños felices son niños sanos.

 

Fuente: etapainfantil.com

Escapadas por Alicante

Escapadas más bonitas en los alrededores de Alicante

alrededores de alicante

En la segunda ciudad más poblada de la Comunidad Valenciana hay muchos planes que hacer, encabezados por la visita al castillo que corona la ciudad: el de Santa Bárbara.  Pero, para quien quiera aprovechar el viaje o para quien viva allí, hay, además, muchas otras opciones en los alrededores de Alicante, a menos de dos horas. Desde visitas a pueblos de la Costa Brava hasta pueblos de montaña con vistas alucinantes.

Ruta por los alrededores de Alicante

Calpe: 50 minutos

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Peñón de Ifach, Calpe. | Shutterstock

Calpe es uno de los lugares de los alrededores de Alicante más visitados y se encuentra a apenas 50 minutos en coche de la ciudad. Su imprescindible es el Peñón de Ifach, que se ve en todas las postales de este destino. Se puede hacer una ruta senderista que sube a esta montaña calcárea después de atravesarla por un túnel.

También merece la pena dedicarle un buen rato a su casco antiguo, donde destacan la calle Puchalt, la calle Gabriel Miró, la plaza de la Villa, el Torreón de la Peça, la muralla exterior y la ermita de Nuestra Señora de las Nieves. Por último, también es recomendable visitar las Salinas de Calpe, una antigua laguna salada que se dedicaba a la producción de sal.

Altea: 45 minutos

alrededores de alicante
Altea. | Shutterstock

A solo 45 minutos en coche de la capital, Altea es uno de las localidades más bonitas que hay en los alrededores de Alicante, ya que en ella predominan las casas blancas y los tejados azules que tanto encanto aportan. Algunos de los puntos más interesantes de este enclave son la iglesia de la Virgen del Consuelo, la plaza de la Iglesia y el mirador de los Cronistas.

Otros lugares que protagonizan las fotos de los viajeros son la calle San Miguel, el Portal Vell y su mirador, el Portal Nou y la Casa Cervantes. Además, se puede terminar la visita caminando por el paseo marítimo o por las playas Roda y Cap Blanc.

Denia: 1 hora

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Puerto de Denia. | Shutterstock

Una hora en coche es el tiempo que separa a Denia de la capital alicantina, así que es una escapada ideal para pasar el día. Los lugares que nadie se puede perder son la calle Marqués de Campo, el Museo del Juguete, la Lonja del Pescado y el puerto.

Además, también son imprescindibles las visitas al barrio de Pescadores, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, el Museo Etnológico, el castillo de Denia y la calle Loreto. Asimismo, en sus alrededores se puede ir a las calas rocosas de Les Rotes, el Parque Natural del Montgó y las pedanías de la Xara y Jesús Pobre.

Elche: 30 minutos

elche
Elche. | Shutterstock

La ciudad de Elche, a 27 kilómetros de Alicante, se caracteriza por conjuntar construcciones de diferentes épocas y estilos arquitectónicos entre sí. Entre sus monumentos más visitados se encuentran la Basílica de Santa María de Elche, el Palacio de Altamira y el Palmeral de Elche.

También suelen llamar la atención de los viajeros el Jardín Huerto del Cura, el Museo Arqueológico y de Historia de Elche y la plaza de las Chimeneas. Además, justo enfrente, a 8 kilómetros, se encuentra la Isla de Tabarca, que es Bien de Interés Cultural, Conjunto Histórico-Artístico, Reserva Marina del Mediterráneo y Zona de Especial Protección para las Aves.

Jávea: 1 hora y 10 minutos

Jávea
Jávea. | Shutterstock

El municipio de Jávea es otra de las escapadas imprescindibles que hacer en los alrededores de Alicante, concretamente a 85 kilómetros de la misma. Algunos de los lugares de interés de este destino son el ayuntamiento de Jávea, la Iglesia-Fortaleza de San Bartolomé, el Mercado de Abastos y la ermita del Santo Cristo del Calvario, que cuenta con una cúpula de teja azul vidriada muy característica.

Si se tiene más tiempo, es recomendable visitar la ermita de Santa Lucía y el Riurau d’Arnauda, que es un edificio porticado y ventilado donde se guardaba la uva pasa por la noche o en días de lluvia para evitar que el proceso de deshidratación se echara a perder. El resto de los lugares de interés en Jávea son la muralla medieval, el Convento de las Agustinas Descalzas, Ca Lambert y el Museo Arqueológico y Etnográfico Soler Blasco.

Guadalest: 1 hora

Guadalest
Guadalest. | Shutterstock

Sin duda, uno de los pueblos más bonitos de España es Guadalest. Se encuentra a solo una hora en coche de Alicante y está rodeado de montañas, enclavado en la comarca de la Marina Baja, de la que se pueden obtener unas excelentes vistas. Algunos de los lugares más interesantes son la Casa Orduña, el castillo de San José, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y una prisión del siglo XII.

Asimismo, también destacan los numerosos museos de Guadalest. Entre ellos se encuentran el etnográfico, el de torturas medievales, el de vehículos históricos, el de saleros y pimenteros y el de belenes.

Moraira: 1 hora

Moraira
Moraira. | Shutterstock

Volviendo a la costa, Moraira es uno de los pueblos más bonitos de la Comunidad Valenciana. Además, Calpe se encuentra a solo 13 kilómetros, así que ambos destinos se podrían visitar el mismo día.

Uno de los principales atractivos de Moraira son sus calas, entre las que destacan Cap Blanc, cala de la Galera, cala de l’Andragó, cala del Portixolet y cala Llebeig. Hablando de un turismo más cultural, destacan el castillo de Moraira, su puerto, el casco antiguo y la Torre del Cap d’Or.

Novelda: 30 minutos

Santuario de Santa María Magdalena
Santuario de Santa María Magdalena, conocido como la pequeña Sagrada Familia. | Shutterstock

Para terminar, a tan solo media hora en coche, se sitúa Novelda, una de las escapadas imprescindibles en los alrededores de Alicante. Su monumento estrella es el Santuario de Santa María Magdalena, que recuerda mucho a la Sagrada Familia de Barcelona y que se encuentra a tan solo tres kilómetros del pueblo. Además, en el núcleo urbano de la localidad también se pueden visitar la Casa-Museo Modernista, el edificio del Casal Fester, la Iglesia de San Pedro, el ayuntamiento de Novelda y el casino.

 

Fuente: espanafascinante.com