Tiempo de calidad en pareja

5 claves y consejos para pasar más tiempo de calidad en parejas

Las obligaciones diarias hacen que pasar tiempo de calidad en pareja resulte complicado. Sin embargo, hacerlo es la mejor garantía de felicidad a largo plazo. ¡Te contamos cómo lograrlo!
5 claves y consejos para pasar más tiempo de calidad en pareja

Cuando empezamos a conocer a alguien que nos ilusiona, hacemos hasta lo imposible por encontrar momentos compartidos. Sin embargo, luego nos vamos relajando, damos la relación por sentada y descuidamos el vínculo. El hecho de formalizar una pareja no significa que podamos desentendernos y que esta seguirá su curso; al contrario, hemos de cultivarla. Por ello, queremos proponerte algunas claves para pasar más tiempo de calidad en pareja.

Este es un elemento fundamental para que el vínculo prospere y ambos miembros se encuentren satisfechos. Y es que es gracias al tiempo compartido que se crea la cercanía emocional, se potencia la intimidad y se crece a la par. Estos momentos sirven para conectar y para poder resolver los problemas y discrepancias.

Es posible que las obligaciones personales de cada uno dificulten el hecho de encontrar momentos a solas en el día a día. Incluso si vivís juntos, probablemente el tiempo que compartís no sea de la calidad que debería ser. Sin embargo, hay algunos consejos que os pueden ayudar.

1. Decide pasar más tiempo de calidad en pareja

Este es un primer paso fundamental que pasamos por alto. Y es que trabajar en la relación es una decisión diaria.

Si nos dejamos llevar por la inercia, es posible que nunca encontremos un hueco en la agenda para esa cita o esa conversación que venimos posponiendo. Por ello, lo principal es tomar consciencia de la importancia y la necesidad de pasar tiempo juntos.

Una vez que coloques a tu pareja y a vuestra relación como una prioridad, y te conciencies de que has de alimentar ese amor a diario, te será más sencillo hallar los momentos para hacerlo. No esperes a que la rutina deteriore tanto el vínculo, que ya sea demasiado tarde.

Momento para compartir en pareja.
El momento para compartir en pareja debe crearse y buscarse desde la decisión firme de ambos.

 

2. Establece rutinas

Las rutinas pueden convertirse en grandes aliadas respecto al objetivo anterior. De este modo, si se integran ciertos planes o actividades en el devenir diario, no será necesario hacer un esfuerzo por buscar ese momento compartido.

Ten en cuenta que aunque busquemos pasar tiempo de calidad juntos, la cantidad también es importante. Compartir la cotidianidad forja y fortalece los vínculos, y es muy positivo saber aprovechar esta posibilidad.

Podéis, por ejemplo, decidiros a cenar juntos todos los días o mantener una charla distendida un rato antes de acostaros. Aunque sean unos minutos, los estáis dedicando solo a vosotros y esto marcará la diferencia.

Además, es importante realizar salidas o planear citas al menos una o dos veces al mes. Estos espacios estarán destinados a interrumpir la rutina, desconectar de las obligaciones y conectar con el compañero. Incluso si tenéis hijos, tratad de cumplir con esta meta, pues es muy común que la paternidad afecte y aleje a la pareja.

3. Ofrece atención y presencia

Si quieres pasar más tiempo de calidad en pareja, hay una máxima que debes seguir: fuera distracciones. Cuando estéis juntos, apagad la televisión, silenciad el teléfono móvil y centrad toda la atención en el otro. Es triste contemplar a tantas parejas cenando juntas y pegadas a las pantallas, sin dirigirse una palabra.

En estas circunstancias, el tiempo compartido es poco útil, pues necesitamos sentirnos vistos y escuchados por el otro. Incluso si no hay nada que decir, ofrecer presencia y atención plena a ese momento compartido marca la diferencia. Una mirada, una sonrisa, una caricia son mucho más valiosas que varias horas juntos en total distancia emocional.

4. Mantén conversaciones de calidad

Hay muchas parejas que, aunque pasen todo el día juntas, no sienten que hayan llegado a conectar con el otro. Y esto se debe a lo pobre de las conversaciones que mantienen.

Hablar del tiempo, de los hijos, de qué comer al día siguiente, no es significativo a la hora de crear intimidad. Para lograrlo, ha de haber vulnerabilidad, autodivulgación y profundidad.

Si quieres acercarte a tu pareja, compártele tus sueños y anhelos, tus miedos y preocupaciones, hazle partícipe de tus expectativas y opiniones. Muéstrate como eres; tu ser verdadero. Incluso aunque esto te asuste.

Mantente dispuesto a conocer, entender y abrazar la esencia del otro. Escúchale con atención, realiza preguntas relevantes, ofrece apoyo y validación a sus emociones.

Es esta dinámica la que refuerza el amor y la que permite comprenderse, negociar y empatizar. Por ello, evita los temas banales y no tengas miedo de profundizar.

5. Escoge actividades apropiadas para pasar más tiempo de calidad en pareja

Por último, es recomendable no descuidar las actividades en las que se va a invertir ese tiempo compartido. Cualquier momento cotidiano (una cena, una charla o simplemente ir a la compra juntos), si es vivido con presencia, puede convertirse en un espacio de calidad. No obstante, es aconsejable que los planes sean diversos y estimulantes.

Así, podéis realizar juntos un pequeño viaje o escapada, apuntaros a algún curso o clase de vuestro interés, ir a escuchar a un grupo de música o a realizar deporte al aire libre. Todo dependerá de los gustos de ambos; eso sí, ha de haber espacio para las preferencias de los dos.

Cuando la pareja se interesa por nuestras aficiones y se anima a compartirlas, esto nos hace sentir especiales, valorados y considerados. Del mismo modo, cuando hacemos lo mismo por el otro, le estamos mostrando cuánto nos importa.

Al realizar actividades divertidas y placenteras con la pareja estamos asociando su persona a esas sensaciones positivas. Por lo tanto, la afinidad aumentará y cada vez nos apetecerá más y nos será más grato estar a su lado.

Correr en pareja.
Compartir actividades que son placenteras para los dos es una manera de potenciar el vínculo.

En la pareja no está todo hecho

En definitiva, pasar más tiempo de calidad en pareja es una decisión y un objetivo por el que ambos debéis trabajar. No siempre será sencillo y en ocasiones será tentador dejarse llevar por la inercia.

El error de pensar que “ya está todo hecho” es frecuente. Sin embargo, seguir cultivando la pasión y la intimidad es la mejor garantía de satisfacción a largo plazo.

 

Fuente: mejorconsalud.as.com

Pueblos de Galicia para desconectar

6 encantadores pueblos de Galicia para desconectar del mundo

Pueblos encantadores de Galicia para desconectar

Aunque Galicia ha experimentado en los últimos años un crecimiento turístico importante, todavía quedan rincones, pequeños pueblos, en los que es posible desconectar del mundo. En primer lugar, por la inmensidad de la propia tierra gallega: esta comunidad de considerables dimensiones alberga lugares recónditos. Y ofrece también una oportunidad real de estar en contacto con la naturaleza, tanto si uno elige para ello el interior como si se decanta por la costa. En este último caso puede ser más complicado, pero para eso estamos aquí con recomendaciones que se ajustan a los deseos del viajero.

Pueblos del interior de Galicia ideales para desconectar

Mondoñedo

Vista paisajística de Mondoñedo
Vista paisajística de Mondoñedo. 

En el interior de la provincia de Lugo espera esta bonita localidad en la que se puede disfrutar tanto de interesantes monumentos como de hermosos paseos sin prisa ni mapa. Mondoñedo puede presumir de tener la que está considerada catedral más antigua de España. Construida y consagrada en el siglo XIII, fue declarada Monumento Nacional a comienzos del XX. La Fuente Vieja, del siglo XVI y conservada en su estado original, o la plaza de Concello, con el ayuntamiento del siglo XVIII, son otros rincones interesantes que descubrir.

En torno a la localidad hay numerosas rutas de senderismo, como la que sigue el recorrido del río Validñadares. Mondoñedo, además, se encuentra a poco más de veinte minutos de la playa de las Catedrales, en plena Mariña Lucense. Como monumento natural no tiene precio, pero es mejor evitar el paseo si lo que uno quiere es un lugar sin masificaciones. Puede ser una buena idea visitarla, sin embargo, cuando ha llegado el momento de volver a conectar con el mundo.

A Ponte Maceira

Ponte Maceira, uno de los pueblos de Galicia ideales para desconectar
Ponte Maceira a través de, precisamente, su popular y precioso puente. 

Considerado por muchos el pueblo más bonito del interior de Galicia, A Ponte Maceira es apenas un conjunto de casas dispersadas junto al río Tambre, que forma en este punto un paisaje espectacular. Los saltos de agua se suceden en torno al puente de piedra medieval, conocido como Ponte Vella, uno de los más bonitos de la geografía española. Es del siglo XII y sobre él pesa una leyenda que le relaciona con el Camino de Santiago, que pasa por aquí en el epílogo que conduce al peregrino a Fisterra.

Ponte Maceira pertenece a la parroquia de Portor, que a su vez pertenece al municipio de Negreira. En la actualidad tiene en torno a 50 habitantes, está rodeado de bosques y pinares y lo envuelve un silencio de lo más agradable. No hay grandes monumentos que visitar, con la excepción del pazo de Balandrón, del siglo pasado, que se encuentra en perfecta armonía con la naturaleza.

La Ribeira Sacra: el paraíso de la desconexión

Belesar

Belesar a orillas del Miño
Belesar a orillas del Miño. 

Con Belesar sucede algo parecido a lo que sucede con Ponte Maceira: es una pequeña aldea situada en un rincón recóndito de la sagrada Galicia de interior, la que conforma la Ribeira Sacra. Esta zona, repleta de templos románicos y con un pasado riquísimo, también ha experimentado un interesante crecimiento turístico, pero de la masificación todavía no ha oído ni hablar. Belesar, situado en la parte lucense de la Ribeira, a los pies del Miño, dividido en dos por el transcurso de este, es un lugar perfecto para desconectar.

Las rutas de senderismo a su alrededor son numerosas. Los senderos del Camino de Santiago de Invierno pasan por aquí, de hecho, así que uno puede calzarse las botas de peregrino durante unos kilómetros. Un fantástico plan es recorrer los llamados Codos de Belesar, unos siete kilómetros de camino empedrado cuyo origen hay que buscarlo en los romanos. Por lo demás, las excursiones en torno a Belesar son numerosas: desde aquí se puede visitar el espectacular Cabo do Mundo, la playa de A Cova o la interesante iglesia de San Paio de Diomondi.

Parada de Sil

Entorno de Parada de Sil, con el monasterio de Santa Cristina de Ribas de Sil entre la abundante vegetación de la zona
Entorno de Parada de Sil, con el monasterio de Santa Cristina de Ribas de Sil entre la abundante vegetación de la zona.

De Lugo a Ourense, de la ribera del Miño a lo alto del Sil. Este pequeño y coqueto pueblo se encuentra en uno de los lugares más privilegiados de la Ribeira Sacra. Como sucedía con Belesar, Parada de Sil es un punto de partida excelente para llevar a cabo excursiones que permitirán conocer la grandeza de la zona. Los balcones de Madrid ofrecen una preciosa perspectiva de los impresiones cañones del Sil y se encuentran a apenas quince minutos andando del pueblo.

Tomando un vehículo, además, no hay que perder la oportunidad de visitar el silencioso y solitario monasterio de Santa Cristina de Ribas de Sil, que lleva en pie desde el siglo XIII. Lejos de estar en un estado ruinoso, aunque el abandono es evidente, se conserva la estructura de los principales edificios, que además se han fundido con la naturaleza del soto de Merilán. Siguiendo el río hacia el norte espera la gran estrella monástica de la Ribeira Sacra: el monasterio de Santo Estevo de Ribas de Sil.

Pueblos de la costa de Galicia ideales para desconectar

O Barqueiro

Precioso pueblo de O Barqueiro
Precioso pueblo de O Barqueiro.

A pesar de encontrarse en la concurrida costa de la provincia de A Coruña, O Barqueiro todavía no suele sufrir aglomeraciones turísticas, por lo que puede ser uno de esos pueblos de Galicia perfectos para desconectar. Es un pueblo marinero típico, cuyo nombre procede del barquero que, hasta principios del siglo XX, trasladaba a las personas de un lado a otro de la ría, que lleva el nombre del pueblo. Es una de las más pequeñas de Galicia, pero tiene el privilegio de asistir al encuentro entre el Cantábrico y el Atlántico.

Precisamente al otro lado de esta espera una de esas playas, la playa de Arealonga, que explica por qué Galicia es uno de los destinos predilectos para los amantes del mar. El pequeño puerto de la localidad se encuentra en la desembocadura del río Sor y es visitable. Tampoco hay que dejar de descubrir el faro de Estaca de Bares, el lugar más al norte de la península.

Sabarís

Playa de Sabarís
Uno de los mejores paisajes de las Rias Baixas se consigue desde la playa de Sabarís.

En el municipio de Baiona se encuentra esta pequeña localidad que fue fundada por los suevos a finales del siglo VI. Su casco antiguo está declarado Conjunto de Interés Histórico-Artístico. Monumentos a destacar: la fuente renacentista del Pombal, de mediados del siglo XVI, o el puente románico que salva el río Miñor, el protagonista de este precioso valle.

Sabarís es también reconocido por ser uno de los rincones más interesantes para la observación de aves. Cuenta con un rincón especializado para ello que, excepto en los meses de verano o invierno más puro, ofrece un escenario de gran valor medioambiental. La vecina Baiona, por otro lado, es una de las localidades más interesantes de las Rias Baixas, aunque en esta el turismo es más notable. Puede visitarse, en condiciones más tranquilas, el Conjunto Arqueológico de Petroglifos de Outeiro dos Lameiros, un recuerdo de una época antigua como el tiempo. Aunque la recomendación principal es la siguiente: disfrutar del buen ambiente y la tranquilidad de su playa, que se abre encantada a los últimos paisajes que conforman las Rias Baixas.

 

Fuente: espanafascinante.com

Curiosidades sobre la lengua

8 curiosidades sobre la lengua

¿Sabías que solo algunas personas la pueden doblar? ¿Y que no existen dos iguales? Te contamos estas y otras curiosidades sobre la lengua.
8 curiosidades sobre la lengua

Nos sirve para hablar, comer, masticar, identificar gustos e incluso para besar con pasión… Te contamos 8 curiosidades sobre la lengua, un órgano muy importante para nuestro cuerpo.

Es que, aunque no la tengamos presente, la lengua interviene en muchas de las actividades que realizamos todos los días. Y para esto necesita ser de cierta forma y tener características específicas. Algunas muy curiosas, por cierto.

Dada su importancia, merece cuidados que a veces pasamos por alto. Sigue leyendo y entérate estas curiosidades sobre la lengua y cómo mantenerla sana.

¿Qué es la lengua?

Antes de contarte sobre sus curiosidades, vamos a aclarar qué es la lengua. Se trata de un órgano formado por varios músculos. Es fuerte, flexible y posee una gran movilidad.

Su aspecto es de color rosado y en su cara superior tiene la particularidad de tener una apariencia aterciopelada. Está cubierta por una mucosa especial que le otorga humedad. Esta característica le permite cumplir varias de sus funciones.

Entre sus roles más importantes se destacan la masticación, la formación del bolo alimenticio, la deglución y el lenguaje. También es la responsable de la percepción del gusto, la textura y la temperatura de los alimentos. Asimismo, interviene en las defensas del organismo al poseer tejido linfático en su interior.

Sus partes se dividen en los siguientes sectores:

  • Cara superior o dorsal.
  • Cara inferior o ventral.
  • Bordes linguales.
  • Base de la lengua.
  • Punta lingual.

Sobre su superficie posee pequeñas protuberancias que son las papilas linguales. Hay 4 tipos:

  • Filiformes: son las más numerosas, responsables de la textura aterciopelada de la lengua. No captan el gusto, sino que se encargan del sentido del tacto para reconocer la textura de lo que comemos.
  • Fungiformes: tienen forma de hongo y poseen propiedades sensoriales. Captan el gusto. Se encuentran sobre todo en la porción anterior de la lengua.
  • Foliadas: se encuentran a los costados de la lengua. Se encargan de drenar la saliva y participan en la autolimpieza del órgano. Además, perciben el gusto.
  • Circunvaladas: también llamadas caliciformes, producen saliva y se ubican en forma de V sobre la base de la lengua, o sea, en el sector más posterior. También captan el gusto.

Por debajo de la lengua se encuentra el frenillo lingual. Se trata de una estructura membranosa que une el órgano con el piso de la boca, sirviendo de fijación.

Lengua de una mujer.
La lengua tiene múltiples funciones. Sin ella no podríamos comer correctamente ni hablar.

1. Cicatriza rápido

Aunque morderse la lengua sea una situación bastante habitual y muy molesta, estas lesiones suelen curarse pronto. Es que una de las curiosidades sobre la lengua es su rapidez para cicatrizar.

Las heridas, las llagas y las lesiones pequeñas sobre su superficie desaparecen en poco tiempo gracias a los tejidos que la conforman y al constante contacto con la saliva.

En general, las lastimaduras superficiales curan al cabo de unos días. Las más profundas no persisten más de 3 semanas.

Debes estar atento a lesiones en la lengua que no se cierran. Pues pueden ser un indicativo de que algo no está bien y deberías consultar con un profesional de la salud.

2. No se cansa

Una de las curiosidades sobre la lengua es que este órgano no se cansa ni fatiga. Y eso a pesar de estar en constante movimiento.

La lengua se mueve gran parte del día para comer, hablar y tragar. Y aunque no se agote, no es el musculo más fuerte del cuerpo como algunos dicen. Los músculos de la mandíbula ejercen mayor presión; los glúteos y los cuádriceps hacen más fuerza. Y el corazón es el que más trabaja.

Además, como ya adelantamos, la lengua no es un solo músculo. Está formada por 17 músculos diferentes que trabajan juntos. De la interrelación de estos filetes surge una matriz flexible, móvil y de gran resistencia.

3. Tiene más de 10 000 papilas gustativas

Las papilas gustativas son un grupo de receptores sensoriales que permiten percibir el gusto. Las mismas no se pueden observar a simple vista. Pues son de un tamaño minúsculo y se encuentran dentro de las papilas linguales.

Por lo tanto, las papilas que mencionamos al describir la lengua, que se observan como protuberancias sobre la superficie lingual, no son las gustativas. Sino que las contienen.

Una persona puede tener hasta 10 000 papilas gustativas. Las mismas se recambian cada 2 semanas, aproximadamente.

Al envejecer, algunas no se regeneran, disminuyendo su número. Personas de edad avanzada pueden llegar a tener entre 2 y 5 mil papilas gustativas en funcionamiento. Esto explica por qué los niños perciben el gusto de manera diferente a los adultos.

Debes saber que, gracias a las papilas gustativas, es posible distinguir el gusto de los alimentos, pero no su sabor. Para esto es necesario el olfato. De la combinación de gusto y olfato surge el sabor real de las comidas. Por eso, al estar resfriados, algunas comidas pueden sentirse insulsas.

Comúnmente se divide a la lengua en distintas zonas que perciben los diferentes gustos. Pero lo cierto es que todos los gustos (dulce, salado, agrio, amargo y umami) se pueden sentir en todas las partes de la lengua.

Es cierto que la mayoría de las papilas gustativas se encuentran en la lengua. Pero hay otras partes del cuerpo que también las tienen. Se han encontrado receptores gustativos en la parte posterior de la garganta, en la epiglotis, los senos paranasales y la nariz. Los bebés y los niños pequeños perciben el gusto a través de las mucosas de sus labios y mejillas.

4. Cada lengua es única

No existen dos lenguas iguales. Todos tenemos una lengua única, distinta a la de los demás. Sus surcos, algunos congénitos y otros adquiridos, hacen que existan estas diferencias.

Por lo tanto, al igual que pasa con las huellas dactilares, el aspecto de la lengua se podría usar como un elemento de identificación personal.

5. No todos la pueden doblar

El 60 % de la población es capaz de doblar de la lengua en forma de “U”. Y no se trata de práctica o destreza. Esta capacidad se debe a cuestiones genéticas.

La presencia de un gen dominante es el que permite realizar esta acción. Y otro gen es el que impide que otras personas lo logren.

6. Medidas

La medida de la lengua varía entre las personas. Se mide desde la epiglotis (cartílago en la parte posterior de la lengua) hasta su punta. En promedio, en una persona adulta tiene 8,5 cm de longitud.

Las mujeres suelen tener la lengua más corta que los hombres. La marca mundial de la lengua más larga del mundo es de 10,1 cm y pertenece a un hombre estadounidense.

7. La lengua puede engordar

Esta es otra de las curiosidades de la lengua. Existe una correlación entre el volumen de grasa de la lengua y la obesidad. Al aumentar de peso, este órgano también engorda.

Además, una lengua grande podría asociarse al trastorno de apnea obstructiva de sueño. Este padecimiento, en el que la respiración se detiene un momento al dormir, es muy común en las personas obesas.

Cuidado de la lengua.
Cuidar la lengua es parte de los hábitos de higiene bucal. Requiere atención como los dientes.

 

8. El aspecto de la lengua puede indicar problemas de salud

Una lengua saludable se ve de color rosado con pequeños bultos que sobresalen. Pero si su aspecto cambia, se hincha o duele puede ser una señal de que algo no está bien en tu cuerpo.

Si notas algo raro en tu lengua, lo ideal es acudir a tu dentista o médico para encontrar la causa del problema y buscar una pronta solución. Estos son algunos de los cambios que pueden indicar algún problema de salud:

  • Manchas blancas: pueden deberse a una candidiasis oral o a una leucoplasia, muy común en fumadores y precursora del cáncer oral. Si las manchas son lineales puede tratarse de un liquen plano oral, una afección crónica asociada al estrés y otras causas.
  • Color rojo: puede deberse a alergias o a falta de vitamina B12 o ácido fólico. También puede ser un síntoma de sufrir escarlatina o enfermedad de Kawasaki. Estos trastornos, más comunes en niños, presentan otras manifestaciones que acompañan el cuadro y deben tratarse de inmediato por un médico.
  • Lengua vellosa: es una lengua que se ve como peluda, de color marrón, negro o blanca. Las papilas linguales aumentan de longitud y se cubren de bacterias que se pigmentan. Se debe a una mala higiene dental y se asocia a personas diabéticas, que toman antibióticos o realizan quimioterapia.
  • Superficie lisa: una lengua suave y sin papilas puede indicar falta de hierro, ácido fólico o vitaminas del complejo B. También puede deberse a micosis, enfermedad celíaca o al uso de algunos medicamentos.
  • Bultos dolorosos: pueden deberse a un virus, una herida o aftas. También cáncer oral, sobre todo si dura más de dos semanas sin curar.
  • Aumento de tamaño: la lengua hinchada o macroglosia puede indicar hipotiroidismo, alguna infección, alergias o enfermedades inflamatorias.

La importancia de cuidar la lengua

Como te contamos, la lengua cumple un rol fundamental para la realización de muchas actividades importantes como comer y hablar. Para que estas funciones puedan realizarse sin inconvenientes, el cuidado de este órgano es primordial.

Limpiar la lengua cada día ayuda a mantenerla saludable. Pues sino, el acúmulo de bacterias sobre su superficie puede conducir a la instalación de varias problemáticas: mal aliento, alteraciones en el gusto, cambios en la flora normal de la boca, desarrollo de micosis o lengua saburral son ejemplos.

Estos son algunos consejos para mantener tu lengua limpia y sana:

  • Higiene oral: el cepillado de dientes, el uso de hilo dental y la limpieza de la lengua deben ser parte de la rutina diaria de higiene. Esto ayuda a eliminar bacterias y restos de alimentos de la boca.
  • Utilizar un raspador: se trata de un utensilio que permite raspar la superficie de la lengua y eliminar los residuos que allí se acumulan. Se deben realizar movimientos de atrás hacia adelante ejerciendo una ligera presión, repitiéndolos varias veces. Si no es posible conseguir este elemento se debe realizar con un cepillo.
  • Observar la lengua: sacar la lengua y controlar su aspecto y su limpieza ayuda a mejorar la higiene y controlar su salud.
  • Usar enjuagues bucales: usar un colutorio con flúor al terminar la rutina de higiene oral ayuda a proteger la boca contra la placa bacteriana y aporta un aliento fresco.
  • Visitar al dentista: las consultas semestrales al odontólogo ayudan a controlar que todo marche bien.

Incluir la limpieza de la lengua en la rutina de higiene oral es fácil y te permitirá cuidar tu salud. Además, podrás contar con este órgano para hacer las actividades de tu vida diaria sin problemas.

 

Fuente: mejorconsalud.as.com